martes, 22 de enero de 2019

SANTA TERESA ESCRIBE DE PARTE DE LA VIRGEN PARA ANIMAR A SU HERMANA CELINA, CARTA 211

 A sor Genoveva (1)  24 de diciembre de 1896 
Navidad 1896 


Hijita querida: 

Si supieras cómo alegras mi corazón y el de mi pequeño Jesús, ¡qué feliz serías...! 

Pero no lo sabes, no lo ves, y tu alma está triste. Quisiera poder consolarte; si no lo hago, es porque conozco el valor del sufrimiento y de la angustia del corazón. Hija mía querida, si supieras qué hundida estaba yo en la amargura al ver a mi tierno esposo san José volver triste hacia mí sin haber encontrado posada...  

SAN JOSÉ BUSCA POSADA

Si aceptas soportar en paz la prueba de no agradarte a ti misma (2), me darás un dulce asilo. Es verdad que sufrirás, pues estarás a la puerta de tu propia casa; pero no temas, cuanto más pobre seas, más te amará Jesús. E irá lejos, muy lejos, para buscarte (3) si a veces te extravías un poco. Le gusta más verte tropezar en la noche con las piedras del camino que caminar en plano día por una ruta esmaltada de flores que podrían retrasar tu marcha. Te quiero, Celina mía, te quiero mucho más de lo que puedes imaginarte... 

Me alegro de verte desear grandes cosas y te las estoy preparando todavía mayores... Un día vendrás con tu Teresa al cielo, te sentarás en el regazo de mi amado Jesús (4) y yo también te tomaré en mis brazos y te colmaré de caricias, porque soy tu madre, tu mamá querida. 

María, la Reina de los ángeles(5) 


 
NOTAS
 
1 El sobre llevaba esta dirección: «Envío de la Santísima Virgen a mi hija querida sin asilo en tierra extranjera». 

2 Cf Cta 109, n. 1. 

3 Cf Im II,11,4. 

4 El «regazo de Jesús» o el «regazo de Dios»: sitio codiciado por Totó y Lili (Teresa y Celina) para cuando estén en el paraíso; Cf UC pp. 520 y 526. 

5 Cf Cta 192 y su nota 2.  

Fuente: Obras completas, santa Teresa de Lisieux, cartas.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario